MÉRIDA.- Ayer, el “Albergue Franciscano del Animal Desprotegido” (AFAD) continuó siendo invadido por su vecino, Santiago Gamboa Suárez, dueño de un deshuesadero, y hasta terminó de tirar la barda que le hacía falta derrumbar.
Ayer publicamos que Gamboa Suárez “a la malagueña” desea adueñarse de los terrenos donde se localiza la asociación protectora de animales, en la carretera a Cholul, pues los tribunales han fallado en su contra cuando ambas partes intentaron determinar al propietario legal del terreno, los cuales dieron la razón a AFAD.
Sin embargo, ayer mismo continuó la embestida contra esta agrupación no gubernamental, pues el susodicho no solo tumbó el muro que le hacía falta, sino que hasta les arrojó chatarras al terreno, seguramente del deshuesadero que tiene, llamado “El Vaquero”.
Voluntarios de la organización civil revelaron a este medio de comunicación que todo el día de ayer los trabajadores de Santiago Gamboa estuvieron amenazando con introducir maquinaria a esta propiedad e intentaron en muchas ocasiones tirarles más chatarra.
En determinado momento llegó la policía ministerial que puso orden y les dejó un número telefónico para reportar cualquier otra anomalía, generada por el dueño de “El Vaquero”.
Sin embargo, para cuidar el patrimonio de los animales indefensos que viven en AFAD los voluntarios han estado durmiendo en el local, haciendo turnos, con el temor de que en cualquier instante su vecino continué afectándolos.
Ayer dimos a conocer que Lidia Saleh Angulo, presidenta de AFAD, expuso que los ex gobernadores Víctor Cervera Pacheco y Dulce María Sauri, donaron en sus respectivos periodos los terrenos que hoy conforman la propiedad donde se cuida y mantiene a los perritos y demás animales domésticos.
Sin embargo, su vecino desde hace años quiere apropiarse de este espacio para incrementar su negocio, y tras largos juicios, las autoridades determinaron que la organización no lucrativa es la dueña del terreno, lo que al parecer hasta ahora no acepta Gamboa Suárez, quien desde el sábado pasado ha estado invadiendo el albergue.
El polvo generado por estas acciones ha enfermado a los canes, algunos de los cuales han tratado de salir del albergue ante la falta de bardas.
Como contexto, la presidenta de AFAD recibió en febrero del año pasado el recién creado Premio Ayuntamiento de Mérida a la Cultura Ciudadana en la categoría de Convivencia con el Entorno Ambiental, por la protección a los animales domésticos abandonados.